Ramon Llull, también conocido como Raimundo Lulio, fue un destacado pensador y escritor catalán. Nacido en Palma de Mallorca, Llull fue filósofo, poeta, místico, teólogo y misionero. Su vida estuvo marcada por una revelación religiosa a, aproximadamente, los treinta años, lo que lo llevó a dedicarse por completo a la vida religiosa.
Quién fue Ramón LLull
Ramon Llull, también conocido como Raimundo Lulio, fue un pensador y escritor catalán que vivió en los siglos XIII y XIV, nacido en Palma de Mallorca. Fue multifacético: filósofo, poeta, místico, teólogo y misionero. Llevó una vida mundana hasta que, a los treinta y dos años, según relata en Vida coetánea, tuvo una revelación que lo llevó a abandonar su vida anterior y dedicarse por completo al servicio religioso.
Después de esta experiencia, emprendió una peregrinación a Santiago de Compostela y luego regresó a Mallorca, donde se dedicó al estudio y a la contemplación durante nueve años. Posteriormente, se retiró al monte, donde afirma haber recibido la inspiración divina para escribir su obra Arte abreviado de encontrar verdad, con la intención de convertir a los paganos al cristianismo.
A lo largo de su vida, Llull realizó numerosos viajes. Presentó ante el papa Nicolás IV un proyecto para una nueva Cruzada. Sin embargo, no obtuvo el apoyo esperado y continuó sus viajes, llegando a ser prisionero en Bugía en 1307. Sobrevivió a un naufragio milagrosamente y continuó difundiendo sus ideas en París y asistiendo al concilio de Viena en 1311. Finalmente, regresó a Mallorca, pero poco después emprendió otro viaje al norte de África, donde se cree que escribió su última obra, antes de fallecer en 1316.
La obra de Llull abarca más de doscientas obras, escritas tanto en latín como en catalán. Es reconocido por contribuir al desarrollo del catalán al utilizar para una prosa culta. Su corpus filosófico, conocido como Arte magna, tiene como objetivo la conversión de los infieles mediante premisas racionales, se trata de un método universal para demostrar racionalmente las verdades de la fe cristiana.
Se dice que Llull tuvo cinco visiones de Cristo durante cinco noches seguidas. La transfiguración de Llull ha dado lugar a una leyenda que cuenta que, cortejaba a una mujer de origen genovés llamada Ambrosia de Castello, a la que siguió en su caballo hasta un templo, pero ella le mostró su pecho carcomido por cáncer, Llull retrocedió horrorizado.
Frases
Riqueza que sin pobreza no se adquiere no es gran riqueza.
La experiencia de la pobreza propicia que las personas den un mayor valor a la riqueza.
Si eres humilde con el soberbio, tendrás paz con él, pero él te hará siempre la guerra.
Ser humilde con alguien arrogante conduce a la paz aparente, pero el soberbio siempre busca dominar.
La paciencia comienza con lágrimas y, al fin, sonríe.
Aunque pueda haber momentos de dolor y tristeza, al final, con paciencia se obtiene a la alegría y la felicidad.
Dar es acercarse a la riqueza, tomar es acercarse a la pobreza.
La disposición para dar es una cualidad, mientras que la codicia lleva a la pobreza espiritual.
El soberbio no se conoce a sí mismo ni conoce a nadie.
La arrogancia ciega a las personas. El soberbio no puede entender ni apreciar a los demás porque está obsesionado consigo mismo.
Amor es aquello que a los que están libres reduce a esclavitud, y a los esclavos pone en libertad.
El amor tiene el poder de transformar a las personas.
Como lo que sabes no es tanto como lo que no sabes, no hables mucho.
Es sabio reconocer las limitaciones propias, siempre hay más por aprender. Es mejor escuchar y reflexionar en lugar de hablar en exceso sobre temas que no comprendemos.
El amor nace del recuerdo; vive de la inteligencia y muere por olvido.
El amor surge de una conexión emocional. Se mantiene vivo a través del entendimiento mutuo. Desaparece si se descuida.
La justicia te proporcionará paz, y también trabajos.
La justicia conlleva tranquilidad, pero también esfuerzo. La búsqueda de la justicia requiere trabajo duro y enfrentar dificultades, pero eventualmente conducirá a la paz interior.
A gran necesidad, gran diligencia.
Cuando las necesidades son grandes, es necesario un gran esfuerzo para satisfacerlas. En momentos de dificultad, se requiere un trabajo diligente para superar los retos.
No tengas amistad con quien tenga poderosos enemigos.
Aconseja ser cauteloso al elegir a las amistades para evitar verse arrastrado por disputas ajenas.